miércoles, 24 de octubre de 2007

El último dragón


Podía haber sido una mañana cualquiera de un día cualquiera, si no llega a ser por que un dragón cruzaba la calle.
Me quedé petrificada, justo en medio de la lengua gris por la que circulan bestias a cuatro ruedas.
El dragón me sonrió y yo le devolví mi mejor sonrisa, esa que muestra lo bien que me sentó el corrector de dientes.
Mientras le mostraba mi dentadura, únicamente pensaba en toda esa gente que desde pequeña me había negado la existencia de los dragones, truncando así mi esperanza de volar con ellos.
Pero ahí estaba él, como siempre, mi madre tenía razón, haberlos hailos, y si que los había, un terror me invadió, quizá fuera el último, o quizá nunca más volvería a verle.
Le pedí permiso para volar con él,
y me marché para siempre.

martes, 9 de octubre de 2007

Delicatessen Emeritenses

















No se como aun me atrevo a cuestionar la pereza de mi bascula cuando vuelvo de casa...



"y sus dirá también como palramos
los hijos destas tierras,
porqicimos asina: jierro, jumo
y la jacha y el jigo y la jigera."

Luis Chamizo














lunes, 8 de octubre de 2007

Transicion

Hoy es uno de esos días en los que sientes que algo ha cambiado para siempre, comienzas con una puta noticia que envenena tus tripas y al llegar a casa te espera otra que debería alegrarte, pero lejos de servirte como antídoto para paliar los efectos de la primera, hace que te sientas rara, como si la camiseta te quedara mas ajustada y los pantalones mas cortos, distinta,adulta...

"Cuando la cuerda comienza a tensarse
la trapecista se da cuenta de que no lleva atadas sus zapatillas
pero ya es tarde para volver atrás..."