domingo, 3 de abril de 2011

Tarde de sol y libro en el Monte de San Pedro.-



"Que dentro hay un mar, lo sé también, llega cada día más fatigado pero siempre llega, como si los golpes del dique no le afectasen, mece los mástiles, cómplice del viento y de los papeles arrastados, y yo, que ya lo sé todo, imagino que me muevo, pero lo que se mueve es ese mar que de una manera sorda, imprecisa, te equivale."

pag.36 de "yo siempre regreso a los pezones y al punto 7 del tractatus" de Agustín Fernández Mallo.