como en el cajón de una pequeña mesilla, donde se mezclan calcetines desparejados,en un vago intento de huir de la temida soledad,en esté cajón se mezclan poemas, fotos y todo aquello que consiga escapar del olvido...
nublado, cargado, cubierto,encapotado,fosco, nubloso, oscuro, nublo, aborrascado, desdibujado...así se aleja el 2010.
limpio mis gafas para amanecer despejada, aclarada,desembrollada, escampada, limpiada, liberada...
esta noche 12 pequeños vasos de chupitos ocuparan el lugar de las 12 uvas, hay motivos, habrá motivos!!!!
Salud!
Se tornan naranjas los sueños, los miedos, los deseos, y nadie cabalga del otro lado, mientras yacen en vaho las palabras más profundas, esas que arañan y se exhalan tiñendo de negros los suspiros. Amanece, y las viejas ranas tristes que nunca serán príncipes se marchan por la ventana.
lunes, 1 de noviembre de 2010
Más que la muerte, me preocupa la vida, su fragilidad, su ser o no ser, su pérdida repentina por no avistar el tranvía.
Hay sucesos que acontecen en nuestra vida una y otra vez, y en esos momentos de nada vale la frasecita de que todo es según el cristal con el que se mira, los hechos son los mismos, lo único certero es que seguimos siendo libres para asumir, aceptar y afrontar, y como siempre nos queda la lucha, no puedo sino pensar que la vida es maravillosa, una pequeña caja llena de sorpresas y putadas, parecida a esos cuentos que leíamos de pequeños donde podíamos elegir el final, es cierto que aquí no es exactamente así, no elegimos el final, pero si somos libres para optar por el camino que nos conducirá a un desenlace u otro. lo mejor de este camino y de esta lucha, el vino y la compañía, el mejor bastón para afrontar la lucha esos a los que quiero, los que sin saberlo arrastran por mi esta molesta carga. en ello estamos, cada día una aventura, volverrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr
... pero el corazón comenzó a caer en el interior del pecho blanco, a caer y a caer, su propia sombra hacía la caída cada vez más profunda... no hay latidos, ahora es hueco el pecho blanco, en su centro, una sombra asoma al precipicio.
Como una perra con bozal contengo mis sueños, me muerdo la lengua para que no se escapen, y salivo pensando en esa casa con jardín donde las tardes huelen verdes, donde tú, fulano, pintarás naranjas los atardeceres donde no se secarán los mares y los limones llenarán la mesa,
está mengana sigue abarcando utopías, con estos brazos alargados y huesudos que te amarran cada noche.
"Pero callad. quiero deciros algo. Sólo quiero deciros que estamos todos juntos." Jaime Gil de Biedma
Acongojada, apoquinada, arrebatada, amordazada, asaltada, acojonada, espero a que salga la luz sin teñirme el vello, a que la desgracia pase por alto nuestro portal.
Hoy no me apetece hacer una entrada sobre Saramago, ni sobre todos los nombres, (y no pq no haya sentido su ausencia, aún estoy dando vueltas con Jose por ese registro donde habitan todos los nombres, buscandole en cada documento, arañando páginas para quedarme con algo suyo) tampoco sobre la gama de blancos y negros de la resonancia digital, hoy sólo me apetece escuchar esta canción, no me apetece quejarme ni maldecir, ni siquiera añorar, no quiero escribir un poema, ni colgar en este blog alguno que me ha hecho estremecer, ya que hoy no ha sido así. Escucho esta canción y me gusta el ritmo, el tempo donde flotan las notas, los colores que me sugiere, lo ligera que es, no duele y eso me gusta.
sábado, 5 de junio de 2010
TODA SU VIDA
Me tumbé a echar una siesta. Pero cada vez que cerraba los ojos, pasaban cirros lentamente sobre el Estrecho, camino de Canadá. Y las olas. Rompían en la playa y luego nuevamente. Sabes que no sueño. Pero ayer por la noche soñé que estaba viendo un entierro junto al mar. Al principio quedé pasmado. Y luego lleno de pena. Pero me tocaste el brazo y dijiste: “No, todo es perfecto. Era muy vieja, y él la quiso toda su vida”.
La vida es un milagro, un caos matizado por el calor de quien respira, incentivado y arrastrado por el péndulo de los estados de ánimo, una lucha, un reto que nos acecha en cada esquina, pero es bella, y a pesar de los pesares están los amigos, está el amor, y aunque te arrastra como un aullido interminable, aunque a veces resulte dificil escapar, aunque queramos volver atrás siempre vale la pena avanzar, remangarse las cicatrices y acicalarse con las pinturas de guerra,y vivir.
(voz de Ismael Serrano) En la última visita a mi casa, a mi mérida, le pillé prestado un curioso libro a mi padre : "El cerdo que quería ser jamón", donde el autor plantea 99 cuestiones de todo tipo que sirven para hacernos pensar, algo así me ha pasado al volver del trabajo:
qué se hace con un niño de dos años que a la hora de volver del cole se te sienta en el portal con un libro de pocoyo y no quiere levantarse?? yo no lo sé, por lo que esperé, a pesar de ser las 14,20 h, para ver que hacía la madre, ésta sujetaba la puerta del portal y le decía una y otra vez: "levanta y vamos"" - levanta y vamos! cada vez más enfadada: - "le-van-ta-te y va-mos!!!
el pequeño de dos años que aún llevaba el babi azul del cole, ni la miraba, estaba sentaito en medio del portal mirando ensimismado los números y colores del libro; yo cada vez estaba más intrigada sobre cómo acabaría la escena, pensando, qué haría yo si fuera esa mamá, finalmente, y tras varios minutos, la mamá cogió al pequeño bruscamente del suelo y lo entró en el portal, a este se le calló el libro al suelo.
y me acordé de mi,de todos y cada uno de los miembros de mi familia a los que le tocó darme de comer en algún momento, de cuando tenía su edad y no quería entrar en casa a cenar por seguir jugando, entonces, me sacaban la cena a la calle y podía hacer las dos cosas, sabían a ciencia cierta que sin la primera nunca haría la segunda. Pero eran otros tiempos, los tiempos del poco-tú, así crcimos, felices, puros y un poco puñeteros.
en fin yo creo que le hubiera bajado la comida al pequeño al portal y me hubiera sentado con él en el suelo para mirar el libro, o no...
Con enajenados transeúntes con uñas mutiladas que arrastran sueños humillados por vengativas esperanzas que no son más que viudas preñadas de cadáveres, de muertos con hilos cercenados por una luna salvaje; la luz huye sin atreverse a mirar atrás, sin dejar hueco para los azules integrados en sábanas de hiel.
Claro que siento la llamada de la sangre, como no sentirla cuando me visita dos veces al día, tres si dejo la puerta abierta, y me dice a grito pelao Bichitoooooo, quieres unas migas???, es entonces cuando muerdo casi 900 kilómetros y maldigo cada palmo que nos separa, y no me como las migas, pero me hincho igual, me hincho de ganas de tragarme este aire que rellena el espacio que dista entre las encinas y este agua salada, y deciros, también a grito pelao, Joder que buena que están las putas migas, y de postre, abrazaros.
Esta tarde discutí con el individuo que ocupa el lado izquierdo de mi cama, está vez tenía la sartén por el mango, no tenía nada que alegar, me encontraba rebosante de razón, toda la situación controlada; así que serré la cama, y lancé su mitad izquierda por el mismo lugar donde evacúo los recuerdos, pero al llegar la noche, sentí la necesidad de hacerme unos huevos fritos, y fue en ese momento, al intentar coger la sartén, cuando me dí cuenta de que esta no tenía mango, y recibí un fuerte sartenazo en mi pie derecho, justo en el nervio que anula el orgullo. Pero era tarde para pedir perdón, ya había tirado de la cadena.
He decidido mercadear con mis miedos. Una no vende sus recuerdos ni sus pensamientos más íntimos,
tampoco las sonrisas robadas, ni lo sueños que expiraron,
pero si los miedos.
Llegados a esta fase del camino, y debido al crash de ideas que sufre mi masa gris, una padece aglomeración de stocks en sus estanterías.
Hoy dejo a precio de saldo los miedos que nacieron ayer, por frescos e innovadores, quizá venda aquellos que me hicieron elegir este camino,
aunque de momento, me reservo esos que brotaron al conocerte,
y a ti, solo a ti, te regalo esos que tuve cuando era niña, aquellos que el hombre del saco no quiso llevarse de mi puerta cuando me robó la bicicleta.
